Un beso, cómo bala al pecho...: septiembre 2016

miércoles, 28 de septiembre de 2016

Versarte...

Soñarte, noche a noche, encontrarte metida en mis recuerdos más inhóspitos, de las maneras más inesperadas que podría alguien hallarse, en tales situaciones, que preferiría narrarlas en tu oído, y ahí, justo antes de dormir, dejar de lado lo irreal de mi sueño para vivir contigo hasta la última gota de fantasía existente en mi ser.

Mirarte, día a día, contemplando la maravilla que significa tu existencia, deseando detener el tiempo, para mantener infinitamente en mi lóbulo temporal la imagen más hermosa que la vida me pudo brindar, tener en mi por siempre el sentimiento de conocerte por primera vez, y olvidar por más de un segundo el miedo de no perderte después.

Besarte, de noche, de día o de tarde, recorrer beso a beso la longitud exacta de tu ser, uniendo la constelación que forman tus lunares, para al fin, descubrir mi universo en tu piel, convertirme en habitante perpetuo de tus caderas y ahí por el resto de mi existencia permanecer.



De todos los verbos existentes, en nuestro idioma, podría describirte letra a letra lo mucho que me fascina tu existencia, lo encantado que me tiene tu aroma, la felicidad que me causa compartir el mismo espacio temporal contigo, de todas las opciones que podría elegir preferiría una en especial, convirtiéndote en musa eterna, sin nombre ni sombra, sin huella y sin esquema, ni un estereotipo que juzgar, sin un pasado que recordar, sin la más mínima posibilidad de casualidad de confusión al transitar, pudiendo elegir entre soñarte, mirarte y besarte, prefiero tenerte, sin hablar posesivamente, no deseo en ningún sentido poseerte, a menos que tu cuerpo me bien interprete, anhelo con toda el alma hacerte mía eternamente, y la única forma de cumplir mi objetivo es versarte, muy delicadamente, versarte, poniendo comas en cada punto suspensivo de tu ser, versarte, denotando las caricias que tu abdomen solicita, versarte, sintiendo tus miedos a flor de piel, versarte, con tu fortaleza sin medida, versarte, entera y con todo el mérito que tu belleza en verso conlleva, besarte como punto final, y amarte por toda una eternidad.




GRACIAS, por darte el tiempo para leerme.♥
Sonríe, la vida es bella.♥

lunes, 12 de septiembre de 2016

Llegaste.

Llegaste un día sin avisar, rompiendo todas las barreras y los esquemas establecidos con anterioridad, como poder superar esa manera tuya de mirar, que llena de escalofríos mi espina dorsal, como arremeter contra esos nervios provocados por ti en todo mi ser.

Llegaste integrando en mi un sentimiento, de una forma nada sutil, y como negarse a sentir algo tan maravilloso por ti, ser indescriptible de alegría, caos y amor, personaje casi anti-natural, podría haberte creado en un manuscrito y aún no te encontraría par.

Llegaste cuando menos te esperaba, de la forma en que llega un desastre natural, arrasando con todo a su paso, con ese impacto y esa fuerza, dejando una calma y provocando una inmensa sensación de paz, invitándome a soñar con tiempos mejores, en los que exista tu sonrisa, tu mirada y tu esencia, mi adicción; donde existas tú, conmigo, por una eternidad, no importa que dure sólo un segundo, si ese segundo lo paso a tu lado.

Llegaste como llega el alba, iluminando todo cuanto es posible divisar, dando motivos para levantarte una vez más y sin retraso activar toda la felicidad, llegaste con toda intranquilidad, incitando a las almas sombrías a que comenzaran a brillar, llegaste llenándome el alma de besos y amor, dejando muy en claro todo significado de imposición, representando, tú, mi gran amor, cada uno de mis sueños diurnos en los que divagaba sobre los adjetivos del amor.




GRACIAS, por darte el tiempo para leerme, espera el vídeo.♥
Sonríe, los motivos sobran y tristeza hay de más.♥

lunes, 5 de septiembre de 2016

Quererte.

El proceso de quererte es tan sencillo, que no necesito utilizar palabras para declarar mi completa perplejidad ante tan irreverente situación, es obvio que por mi organismo corre el gen del romanticismo, por el contrario es evidente que soy un completo desastre a la hora de hablar de amor, es nulo mi entendimiento sobre este raro sentimiento que tan repentinamente surgió, durante esos escasos días en que apenas te conocía, durante esas largas noches en que la honestidad nos inundaba y entre textos el romance presos nos tomaba.

Quererte, enamorarme cada día un poco más de tu sonrisa, de tus ojos, de tu forma de demostrarme que me quieres,
quererte, lo más fácil que ha podido existir en la vida,
quererte, la simpleza de la palabra misma que no alcanza para englobar toda esta dicha que me provoca a mi lado tenerte,
quererte, conmigo, a cada instante,
quererte durante un largo tiempo y no dejar de quererte ni un instante.

Por qué el querer no incluye unidad de medida,
ya que al quererte no importa nada más en la vida,
por qué el querer es sentirse libre de estar en cualquier lugar
deseando siempre estar queriéndote, en cualquier lugar pero contigo.

Fue una total sorpresa que este cariño apareciera, tanta perfección sería imposible en otra situación, y es que toda nuestra compatibilidad cae en lo trillado, y es que el brillo de tu sonrisa cae en la más grande maravilla, nada se compara con ese par de ojos cafés mirándome de esa manera tan tuya, con esa ternura, con esa paciencia, con toda esa calma que transmite tu mirada, no sé cómo llegué a este punto de estar escribiéndole a alguien sobre el querer, solo sé que disfrute cada paso y, si me lo permites, quisiera disfrutar cada instante tomada de tu mano. Quédate el tiempo que desees, siempre habrá espacio para ti en mi corazón, me quedare el tiempo que me lo permitan tú y la vida, por qué no desearía estar en otro lugar, por qué no desearía estar con nadie más, por qué no imaginaria estar en otro tiempo u otra galaxia donde no existas tú, por qué te quiero, y quiero quererte.



GRACIAS, por darte el tiempo para leerme, espera el vídeo.♥
Sonríe, dale vuelta a mi mundo con tu hermosa sonrisa.♥