Un beso, cómo bala al pecho...: febrero 2017

miércoles, 15 de febrero de 2017

Insomnio

Maldito insomnio, maldición, quita esa imagen de tu rostro frente a mí,
borra los recuerdos que aparecen cada vez que cierro los ojos,
noches cómo ésta vuelven poeta a cualquiera,
cualquiera con un sentimiento ligeramente sincero.

Te escribo a ti, aunque no me leas, o me escribas,
te escribo porque en mi conocimiento eres quién
entenderá lo que, aveces, ni yo entiendo,
entenderá el insomnio que se vive en la soledad,
entenderá el vacío que deja querer demasiado a alguien,
aún después de que se va.

No puedo, no sé y no quiero aprender a vivir con este vacío en el alma,
no sabes lo mucho que dolió, y lo mucho que aún duele,
sé que puedes entenderlo, pero, también sé que en realidad
no imaginas cómo se siente.

Llévate todo lo que dejaste en mí, no me dejes ni una sonrisa, ni una lagrima,
llévate los días nublados en la cama y los días soleados en la playa,
llévate la música que me hiciste amar y odiar,
rompe mi guitarra, cómo todo lo demás,
córtame las manos, si no puedo basar mis versos en tus besos,
quémalo todo, destruye hasta lo más mínimo que queda,

                                yo no tengo el valor,

                                                   ni la fuerza,

                                                              y mucho menos las ganas.

Ahora lo único que tengo es insomnio, en el que apareces tú,
tú y tu maldita presencia que inexistente rompe y perturba mi soledad,
tú y tu profunda mirada, y tus labios, y ese estremecimiento que causa tu voz,
maldito insomnio, maldición, devuélveme el sueño o vuelve tú,


                                           ¡MALDICIÓN!