Un beso, cómo bala al pecho...: junio 2020

miércoles, 3 de junio de 2020

Sentimientos.


En qué momento llegamos a este punto… cuando pasamos de algo sencillo y sin sentimientos a encontrarnos hablando en la madrugada de cómo no hacernos daño, de los porqués de que no funcionemos y de las muchas razones para terminar lo antes posible con este teatro.

Mi problema es ese, sabes…no me detengo a pensar en sentimientos, hasta que alguien más llega y me habla de las posibilidades de que se dañen, supongo que esa no era una opción hasta que lo mencionaste. Crees, muy en el fondo, que miento cuando digo que el amor me da miedo, el simple hecho de parecer frágil ante otra persona me da miedo…porque eso les da un poder inimaginable. Así como no me permito ser manipulada por nadie, también tengo la capacidad de soportar lo insoportable, en caso de que mi cerebro perciba estar haciéndole daño a otro ser humano…siempre me percibo egoísta.

Ojalá un día tomes en serio lo que digo, acerca del cariño que tengo por ti y lo que has venido a representar…pero, mezclar cariño con amor es un tema fuerte, y, al ser quien escribe, jamás me he permitido darle un toque ligero a mis palabras. También, es cierto que, prefiero evitar los temas de sentimientos porque no sé tratarlos, los nervios no me lo permiten, soy buena escribiendo pero no tan buena hablando…no cuando no son datos exactos, tú sabes que soy bastante estricta en eso.

Mientras que el sentido de la vida no sea descubierto, los sentimientos se seguirán mezclando, y las palabras serán encapsuladas…bien podría mencionar que todo en ti es increíble, porque como es posible que tanto dolor exista en una persona como tú, que sin querer sobresales de la multitud…y en cualquier ambiente te haces notar.

Podría pasar contigo tardes completas…y convertir toda la semana en jueves por verte sonreír…pero no podría imaginarme las madrugadas sin la calidez de tus brazos rodeándome.